Alfredo Jalife-Rahme
24/05/2021 | Publicado en la Red de Geografía Económica 492/21 el 16/05/2021
Existe un impactante mapa cronogeopolítico que demuestra la expropiación militar de tierra palestina de 1946 a 2010 (https://bit.ly/3bmv5t8), agudizado 11 años más tarde con el irredentismo de los colonos jázaros no-semitas ashkenazis (https://amzn.to/3hs8kb6) en Cisjordania: en particular, la enajenación catastral de las propiedades de los autóctonos palestinos en el icónico barrio de Sheikh Jarrah en Jerusalén Oriental en Al-Quds, a punto ser totalmente judaizado al precio de limpiezas étnicas (https://bit.ly/3w6eDVV).
Más allá de que Israel fue condenado como un Estado apartheid, según HRW (https://bit.ly/2SV9Jgp), la realidad de los hechos a lo largo de la cronogeopolítica de 104 años –desde la declaración del canciller británico lord Arthur Balfour en 1917, pasando por la bendición de los banqueros Rothschild para la creación de Israel, hasta la imperante situación hoy con Netanyahu– ha desembocado en la existencia de facto de varios estados palestinos deliberadamente inconexos y segregados, además de la erección de muros por Israel –imitados por Trump y su yerno talmúdico Jared Kushner en la frontera de EU con México–, que pretende atomizar la amenaza demográfica de la hoy mayoría palestina frente a la minoría israelí en la Palestina histórica que va del rio Jordán hasta el mar Mediterráneo, según el ejército israelí (https://bit.ly/3eDleBt).
Las inconexas palestinas son: 1) la Franja de Gaza; 2) Cisjordania,frontera con Jerusalen oriental en Al-Quds; 3) Jordania, y 4) la “ Palestina de los Refugiados” de casi 6 millones, la población más grande de refugiados en el mundo de 2.1 millones en Jordania, 528 mil 616 en Siria, 452 mil 669 en Líbano y 240 mil en Arabia Saudita (https://bit.ly/3w0MKyu).
La “ primera Palestina ”, constituida por la Franja de Gaza, inconexa con la segunda Palestina de Cisjordania, ostenta 2 millones de habitantes y uno de los peores PIB per cápita del mundo; comporta diferentes demografías y alianzas de las otras palestinas, gobernadas por los grupos integristas de Hamas y de Yihad islámica, vinculados geopolíticamente con Turquía, Qatar e Irán.
La “ segunda Palestina ”, Cisjordania, gobernada por la Autoridad Palestina, vestigio de la OLP de Yasser Arafat, es apoyada por las petromonarquías árabes, con excepción de Qatar, y la mayoría de los países de la Liga Árabe, ostenta 3 millones de habitantes, donde Israel ha instalado a 418 mil 600 colonos, según la CIA, además de otros 215 mil 900 colonos jázaros no-semitas ashkenazis, hoy pertrechados en Jerusalén oriental en Al-Quds, donde todavía resisten heroica y supervivencialmente 370 mil palestinos (https://bit.ly/2Qp3ZKU).
Se desprende que las “ dos Palestinas” de Gaza y Cisjordania miran a diferentes horizontes geopolíticos cuando la gran noticia hoy es que Hamas ha conseguido seducir la revuelta millennial de los palestinos tanto en Jerusalén oriental –lo que constituye un gran triunfo, ya que Al-Quds es el tercer sitio sagrado de mil 800 millones de feligreses musulmanes (https://bit.ly/3xXGuJF)– como a los palestinos israelíes en las entrañas geográficas de Israel.
El núcleo duro del Partido Likud desde el general Ariel Sharon –perpetrador de la carnicería en los campos de refugiados palestinos de Sabra y Shatila en Líbano en 1982– considera a Jordania como la “verdadera patria de los palestinos (https://bit.ly/33LGWgq)” expulsados de la Palestina histórica.
Hoy, Jordania, la proyectada “ tercera Palestina”, con casi 11 millones de habitantes, es frontera con Cisjordania e Israel a lo largo del río Jordán. Con el asombroso despertar de los palestinos que viven en Israel como tal y han sido asimilados como ciudadanos israelíes –tienen ciudadanía de pasaporte, pero sin ciudadanía democrática igualitaria–, se ha detonado el esbozo de lo que sería la “ cuarta Palestina”.
La gran noticia de los sucesos en curso es que los palestinos de Gaza están consiguiendo la hazaña de reconectarse con sus hermanos de Jerusalén Oriental en el Al-Quds y en Cisjordania. By the time being…
Fuente original: https://www.jornada.com.mx/2021/05/16/opinion/012o1pol